Definen ejes para negociar con el FMI

El ministro de Economía, Roberto Lavagna, definirá entre hoy y mañana los lineamientos de la próxima e incierta negociación con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

El ministro regresó ayer de China, y a partir de hoy se reunirá con sus principales colaboradores para evaluar los planes de la delegación que partirá mañana por la noche a Washington.

En este sentido, luego de algunos titubeos, se decidiría que la misión no fuera de carácter sólo "técnico", sino que fuera liderada por los principales negociadores: el secretario de Finanzas, Guillermo Nielsen; el secretario de Coordinación Técnica, Leonardo Madcur, y el subsecretario de Financiamiento, Sebastián Palla.

Estos funcionarios buscan lograr un programa de 3 años que incluya la refinanciación de vencimientos por unos 12.000 millones de dólares.

Sin embargo, los funcionarios reconocen que la estrategia del Fondo aplicada en otros países permitiría lograr solamente un rollover parcial, a cambio de exigir menos condicionalidades. Los tiempos de la negociación estarán dominados por la campaña electoral argentina, aunque el Gobierno debe cubrir pagos con el FMI por unos 1800 millones de dólares hasta fin de año.

En cuanto a las posiciones enfrentadas, se espera una áspera discusión, debido a los reclamos del Fondo para que el país retome la agenda de reformas estructurales contempladas en el programa que se suspendió hace un año.

En este sentido, el staff del organismo multilateral considera que el superávit fiscal primario (antes del pago de la deuda) debe ubicarse entre el 4 y el 4,5% del PBI, para poder cumplir con el repago de la deuda, mientras que el Gobierno insiste en que se mantendrá en un objetivo de ahorro del 3 por ciento.

Por otro lado, el Fondo sostiene que la política de servicios públicos que tiene el Gobierno no es sustentable, ya que los acuerdos transitorios alcanzados con unas 20 empresas no se reflejarán en un aumento de la inversión.

El FMI también pide una rebaja de los impuestos distorsivos y de la intervención en el mercado cambiario, para permitir la apreciación del peso. Además, exige una estrategia realista para contemplar a los bonistas que no aceptaron el canje de la deuda para salir del default.

Más deuda voluntaria

Para encarar la negociación con mayor oxígeno, el Gobierno realizará hoy la primera emisión en dólares de su programa financiero posterior al default.

La emisión será de 500 millones de dólares en Boden 2012, luego de la colocación de 3000 millones de pesos en Boden 2014, en las últimas dos semanas. El programa financiero autoriza al Gobierno a emitir hasta 1000 millones de dólares en Boden 2012, sin contar las operaciones que hasta el momento se realizaron con Venezuela por 300 millones de dólares. Además, en el último trimestre, habría una emisión de bonos en el exterior.