Kelly LeBrock sigue siendo una mujer al rojo vivo

Kelly LeBrock fue la protagonista de la inolvidable comedia “Una chica al rojo vivo” (The Woman in Red). Fue una de las mujeres más sexy de la década del '80 cuando se vistió de colorado y sedujo a Gene Wilder.

En el argumento de la comedia de 1984, Theodore, el personaje de Wilder (protagonista y director) estaba felizmente casado cuando conoce a Charlotte, una impactante mujer vestida de rojo a quien el aire de las rejillas le levanta indiscretamente su falda. La busca, la seduce y ella accede... a pesar de también estar casada.

En el trasfondo de la película, se hace un análisis de la infidelidad en el matrimonio, de los valores de la sociedad conservadora, y de las relaciones humanas de diversa naturaleza. El film inmortalizó a la banda de sonido, compuesta por Stevie Wonder, que consiguió el Oscar a la Mejor canción por "I Just Called to Say I Love You" (Solo llamé para decirte que te amo).

Esta semana, Kelly LeBrock fue a cenar al restaurante Madeo y aquellos que quedaron encantados con verla no perdieron la oportunidad de sacarse una foto o pedirle un autógrafo. Lo impactante del momento es que la actriz estaba vestida de rojo, el color que la hizo famosa.

A los 51 años, LeBrock se mostró sonriente y accesible a la gente y los paparazzi. Atrás quedó su duro pasado cuando estuvo casada con Steven Seagal, el hombre al quien conoció cuando él fue su guardaespaldas y años más tarde lo acusó de golpes y abuso y violación. Con el actor tuvo 3 hijos: Annaliza (1987), Dominick (1990) y Arissa (1993).

Después de “Una chica al rojo vivo”, Kelly protagonizó La mujer explosiva (1985). Recibió el mismo año el premio ShoWest Convention -premio de una cadena de distribución y exhibición- como Mejor actriz promisoria.

Durante los años posteriores estuvo parcialmente retirada debido a la crianza de sus hijos, aunque participó en varias películas, en papeles secundarios. En la década de 1990 protagonizó seis filmes, entre ellos la película de acción Difícil de matar (1990), junto a su marido Steven Seagal. Se divorció de Seagal en 1996.

En la década de 2000 actuó algunos roles secundarios, y el rol principal en la película The Mirror (2007). Participó también en nueve capítulos en la serie telerrealidad de la TV británica Hell's Kitchen.

En este 2011... sigue siendo una bella mujer al rojo vivo.