Ante los aumentos, el Gobierno pone a los alquileres bajo la lupa

En lo que va del año las subas llegaron al 50%. Por eso, la Unión de Inquilinos de Argentina (UIA) reclamó una política oficial para evitar los sobreprecios. El tema será tratado en los próximos meses.

Por Canal26

Domingo 30 de Julio de 2006 - 00:00

Las asociaciones que agrupan a inquilinos, destacaron la actitud del gobierno de prestar mayor atención al desarrollo del negocio de los alquileres y de implementar mecanismos para moderar los abusos en los contratos y en los precios de la renta de inmuebles.

La expectativa apunta al secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, quien sumó los alquileres a la lista de sectores que serán puestos bajo observación en los próximos meses para estudiar que medidas se aplicarán en el área, que en el último año mostró un incremento del 50 por ciento.

"Me parece muy bien que el Estado intervenga y que el aumento excesivo de los alquileres sumado a los abusos en las cláusulas de los contratos, esté en la agenda pública", subrayó hoy a Télam Radamés Marini, presidente de la Unión Argentina de Inquilinos (UAI).

Marini, explicó que desde junio de 2005 la asociación está reclamando la presencia estatal en el sector, debido a un aumento de un 70 por ciento en los alquileres en el término de dos años.

"En diciembre del año pasado también le propusimos al gobierno la creación de un servicio de conciliación locativa, donde los inquilinos y los propietarios tuvieran un ámbito como tienen los consumidores y los usuarios".

Otro de los temas que propuso la UAI -explicó- "es transparentar los contratos de alquileres y poner de manifiesto la irregularidades que existen actualmente". Marini sostuvo que una de las cláusulas más comunes que desafían la ley hoy, es que a los seis meses del contrato el locador y el locatario deben repactar un nuevo valor del inmueble. "Situación que aunque es totalmente ilegal, los inquilinos terminan aceptando porque si no no les renuevan el contrato", afirmó.

Agregó, que en estas circunstancias de total irregularidad, también se están alquilando departamentos invisibles, "donde hay propietarios que exigen arreglar inmuebles en malas condiciones. Sobre la posibilidad de congelar los contratos, Marini sostuvo, que es una medida muy extrema. Esa propuesta nosotros no la hemos reclamado nunca y no la reclamamos.

"Es la última medida que hay que tomar, en el caso de que las otras no funcionen y que no lleguen los propietarios de bienes de rentas a una reflexión", aclaró. "Creo que si el Estado convoca a la reflexión, posiblemente tendría éxito, como ha tenido en otras áreas".

En cambio, la titular de la Asociación de Inquilinos de la República Argentina (AIRA), Noemí Caracciolo, pidió un congelamiento de los alquileres que en algunos casos, aumentaron en un 100 por ciento, en declaraciones a Radio 10. "Hay inquilinos que pagaban 300 o 400 pesos, ahora pagan 700 u 800 pesos por un dos ambientes", dijo Caracciolo, en referencia a los contratos que deben ser renovados y que para los vigentes, los precios se incrementan en un 50 por ciento".

También, se refirió a las cláusulas en los contratos que no están permitidas, "les proponen repactar cada seis meses, cada uno pide lo quiere, no hay nada regulado y mucha gente está quedando en la calle", afirmó.

"Tengo muchos juicios de desalojo, y una renovación la llevan de 500 a 900 pesos. "La ley 25561 dice que no se pueden indexar los contratos y no hay contrato más grande que una ley".

Por su parte, Marcos Bergenfeld, presidente de la Asociación de Propietarios de Inmuebles en Propiedad Horizontal, remarcó que hay muchas medidas que se pueden tomar antes de congelar los alquileres, que a su juicio sería el fin de la construcción y del crecimiento en los emprendimientos inmobiliarios. Sobre, las cláusulas ilegales en los contratos, advirtió que los inquilinos no debieran tomarlas en cuenta, porque no tienen ningún valor.

"Nosotros siempre le aconsejamos a la gente que nos trae este problema que no le preste atención". En la práctica -señaló- no están fácil para el propietario desalojar al inquilino, si este no acepta repactar el alquiler antes de que termine el acuerdo. "Creo que bajo ningún concepto se puede hablar de renegociar un contrato. Es una cláusula que han impuesto algunos propietarios y que no se debe tener en cuenta". Pero aclaró, que estaría totalmente de acuerdo con el Gobierno, si este determina que ese tipo de irregularidades no deberían figurar más.