Policía brasileña busca al barra "Bebote" Álvarez

El barrabrava de Independiente, que fue visto en la tribuna en el último encuentro de Argentina, es buscado por la policía de Brasil, donde tenía la entrada prohibida. Su "mano derecha", Hernán Palavecino, fue deportado el martes.

Por Canal26

Viernes 27 de Junio de 2014 - 00:00

El líder de la barra brava de Independiente, Pablo "Bebote" Álvarez, ingresó ilegalmente a Brasil por vía terrestre el mismo día del partido entre Argentina y Nigeria en Porto Alegre, correspondiente al Grupo F del Mundial 2014, según confirmó la policía de esa ciudad.

Álvarez cruzó el paso fronterizo de la localidad de Santana de Livramento, lindante con la ciudad uruguaya de Rivera, en la madrugada del miércoles, sin dejar registro de su identidad ante las autoridades migratorias del país.

De acuerdo con las investigaciones realizadas, Álvarez salió de Argentina a la 1 por el puente Colón (Entre Ríos)-Paysandú (Uruguay) en su camioneta personal.

Las autoridades brasileñas analizan si su ingreso al estado de Río Grande del Sur se produjo en el mismo vehículo o contó con uno de apoyo en la localidad uruguaya de Tacuarembó, a 115 kilómetros de la frontera.

La misma ruta empleó Hernán Palavecino -considerado la "mano derecha" de Álvarez-, que fue deportado por Brasil en Santana de Livramento el martes por la mañana.

El líder de la barra de Independiente, sin restricciones para salir de Argentina, tenía prohibido su ingreso a Brasil al figurar en la lista de 2.100 hinchas informados por el Ministerio de Seguridad de la Nación por sus antecedentes violentos en espectáculos deportivos.

Sin embargo, efectivos de la Policía Federal Argentina, que trabajan en Brasil durante la disputa del Mundial 2014 en el marco de un convenio de cooperación y prevención de la violencia, reconocieron a "Bebote" en el estadio Beira-Rio de Porto Alegre, donde se jugó el partido con Nigeria.

El barra escapó del lugar antes que los efectivos brasileños lo demoraran para aplicarle la Ley del Extranjero, que otorga un plazo de 72 horas para abandonar el país.

Por lo sucedido, fuentes de seguridad brasileñas reconocieron que trabajarán para un control más exhaustivo en el paso fronterizo de Santana de Livramento, por donde se estima que llegaron otros barras con ingreso vedado.