Newells y Vélez no se sacaron ventajas

Newell´s Old Boys y Vélez Sarsfield igualaron sin abrir el marcador al cabo de un mal partido disputado en el estadio Marcelo Bielsa.

Por Canal26

Lunes 2 de Marzo de 2015 - 00:00

Newell's Old Boys y Vélez Sarsfield intentaron poco esta noche y terminaron 0-0 en el estadio Marcelo Bielsa, en el cierre de la tercera fecha.

Con este resultado, Vélez no pudo volver a la punta y quedó dos unidades del pelotón de privilegio que lo conforman Rosario Central, Boca Juniors y Estudiantes de La Plata.

Por su parte, Newell's sumó un nuevo partido sin ganar de local, ya que en su presentación había perdido con Independiente 3 a 2.

En el primer tiempo, la primera media hora el juego estuvo friccionado, con mucha marca. Newell's buscó abrir la cancha con Nicolás Castro y Víctor Figueroa, ante un ordenado Vélez, muy bien parado, aunque con sus delanteros aislados del resto.

La primera chance clara se dio recién a los 35 minutos. Castro tiró un centro por derecha, el rebote le quedó a él, remató y el arquero uruguayo Sebastián Sosa tapó en gran reacción.

Y a los 45, tras un córner y un remate de Leonardo Rolón, sacó rápido Oscar Ustari para Figueroa, llegó al área, remató cruzado con Sosa vencido y terminó salvando el juvenil Fausto Grillo.

En el complemento, el juego empezó parejo y a los 9, fue Rolón el que probó y el esférico, tras rebotar en un defensor rival, pegó en el travesaño y luego controló Ustari.

El volante de Vélez era el más peligroso de su equipo, y a los 18, otra vez, sin marca, sacó un remate que salió apenas afuera.

De a poco, Vélez se acercaba a Ustari, aunque con los cambios, el técnico Miguel Angel Russo dejó entrever que se conformaba con el punto.

Newell's, cuando promediaba la etapa, llegó con un derechazo apenas arriba de Maximiliano Rodríguez, quien estuvo lejos de su mejor versión.

Los minutos finales fueron de ida y vuelta, pero Newell's, sin grandes ideas, fue el que más se acercó al área rival.

El empate fue justo, ya que ninguno de los dos tuvo la inteligencia necesaria para romper el esquema defensivo del contrincante.