Mangeri no quiere dar la cara ante la familia de Ángeles

El portero, acusado del asesinato de la menor, le pidió a su abogado Adrian Tenca que pida permiso para ausentarse de audiencias del debate que se lleva a cabo por "abuso sexual con acceso carnal en grado de tentativa agravado y femicidio agravado".

Por Canal26

Miércoles 18 de Marzo de 2015 - 00:00

El portero Jorge Mangeri pidió hoy, a través de su abogado defensor, permiso para ausentarse en algunas de las audiencias del juicio oral en el que se lo juzga como presunto autor del crimen de la adolescente Ángeles Rawson.

El pedido fue formulado por escrito por el abogado Adrián Tenca ante el Tribunal Oral en lo Criminal 9 porteño y en el mismo se argumentó que existen "demoras en los traslados" entre la cárcel y el lugar en el que se lleva adelante el juicio.

Tenca también aseguró que Mangeri le delegó la facultad de decidir cuál será la audiencia en la que estará presente.

El juez Fernando Ramírez, presidente del Tribunal, le preguntó a Mangeri si estaba de acuerdo con el planteo de Tenca y éste asintió.

Como no se manifestó oposición a la medida por parte de la querella y la fiscalía del caso, el tribunal asintió siempre que se avise de las ausencias del acusado con anticipación.

En el juicio, se juzga Mangeri como acusado de "abuso sexual con acceso carnal en grado de tentativa agravado y femicidio agravado".

El único imputado es Jorge Mangeri, encargado del edificio en donde vivía la joven.

Ángeles Rawson, de 16 años, desapareció el lunes 10 de junio del 2013 cuando regresaba a su casa del barrio porteño de Palermo.

Las cámaras de los edificios registraron el momento en el que la joven ingresó por la puerta principal del edificio donde vivía junto a su familia, y donde también estaba Mangeri.

Al día siguiente su cuerpo fue hallado en el predio de la CEAMSE de la localidad bonaerense de José León Suárez, y días después el portero fue detenido a raíz de una declaración en la que se autoincriminó.

Luego Mangeri dijo ser inocente y que la declaración que había hecho fue a raíz de ser amenazado por un grupo de personas a las que nunca identificó, y de quien dijo recibir una golpiza, aunque se determinó que las heridas habían sido autoinflingidas.

En el juicio que afronta desde hace días, el portero ratificó que es inocente y dijo que se enteró del crimen a través de la televisión.