Sobreseyeron al pai César y al "Narigón": a juicio va "Chavito"

Sólo uno de los cuatro imputados mayores de edad que había por el asesinato de la joven va a juicio oral y público. Rito umbanda, fiestas sexual y drogas en un crimen aún sin resolver.

Por Canal26

Viernes 20 de Noviembre de 2015 - 00:00

El juez de Garantías de San Martín Mariano Porto elevó la causa por el crimen de la adolescente a juicio oral con Joel Fernández (19), alias “Chavito”, como único imputado, y sobreseyó a Elías Fernández (21), conocido como “Narigón”, y al pai umbana César Sánchez (46).

En tanto, el restante de los imputados fue un menor de edad, quien también fue sobreseído en septiembre último por el fiscal del Fuero Penal de Responsabilidad Juvenil Mateo Guidoni.

El "pai César", "Chavito" y "Narigón" habían estado detenidos en el marco del caso hasta fines de diciembre del año pasado, pero la Sala I de la Cámara de Apelaciones de San Martín revocó sus prisiones preventivas y todos ellos recuperaron la libertad.

El 8 de noviembre pasado, la Cámara de Casación Penal bonaerense rechazó un recurso presentado por la familia de Melina para que todos ellos vuelvan a prisión y ahora el juez Porto los sobreseyó definitivamente a dos de ellos.

El único que quedó imputado y será sometido a juicio oral es "Chavito" Fernández, quien está acusado del delito de "homicidio doblemente calificado por femicidio y por el concurso premeditado de dos o más personas, violación seguida de muerte y privación de la libertad agravada por resultado muerte y por la participación de tres o más personas”.

Melina (17) fue vista con vida por última vez el 24 de agosto de 2014, cuando salió del boliche “Chankanab” de San Martín, adonde había ido a festejar su cumpleaños.

La Policía inició su búsqueda hasta que el 23 de septiembre fue hallada asesinada a orillas del arroyo Morón, a pocos metros del predio de la Ceamse, de José León Suárez.

Los primeros resultados de la autopsia establecieron que Melina había fallecido por “sofocamiento” entre 20 y 25 días antes de ser encontrado su cadáver, pero hasta hoy la mecánica de la muerte no pudo ser determinada.

En base a la declaración de una testigo clave, los investigadores sospechan que Melina fue llevada a una casa de Pablo Podestá, partido de Tres de Febrero, donde se realizó una fiesta de sexo, drogas y alcohol y luego la mataron a golpes y arrojaron dentro de una bolsa en el mencionado arroyo.