Andan subtes tras el paro gremial que perjudicó a miles de pasajeros

El servicio se paralizó alrededor del mediodía de este jueves, en momentos en los que una intensa lluvia caía sobre la Capital Federal, y se reanudó pasadas las 16:30, al cabo de una reunión entre representantes gremiales en la estación Congreso de Tucumán, de la Línea D, en el barrio de Belgrano.

El disparador del conflicto se produjo justamente en esa estación cabecera, ya que el paro se anunció poco después de que ocurrieran serios incidentes allí cuando denominados "delegados de base" realizaban una asamblea en la que irrumpieron miembros de la Unión Tranviaria Automotor (UTA).

Los disturbios, que duraron unos pocos minutos, agregaron más leña al fuego de una interna gremial que comenzó hace meses y que mantiene como rehenes a decenas de miles de usuarios del subterráneo y el Premetro.

Representantes gremiales denunciaron que una "patota" de la UTA, de unas 30 personas, atacó a los empleados que estaban participando en la reunión.

Claudio Della Carbonara, uno de los delegados, dijo que los agresores portaban incluso "armas de fuego".

Después del mediodía solamente continuaron funcionando las líneas C y H durante un par de horas, aunque más tarde se sumaron al paro junto a los ramales A, B, D y E, más el Premetro, alrededor de las 14:00.

Esta situación generó innumerables inconvenientes a las personas que se desplazaban por las zonas céntricas de la Capital Federal en el momento más húmedo del día. El servicio se normalizó hacia las 18:00, sobre el filo de la hora pico al cabo de la jornada de trabajo, cuando ya no llovía.

Voceros de Metrovías adjudicaron la súbita paralización del servicio al reiterado conflicto entre los denominados "delegados de base" de los trabajadores y dirigentes de la UTA, el gremio que los nuclea.

Los incidentes en la estación Congreso de Tucumán se originaron cuando los delegados llevaban adelante una asamblea como parte de un plebiscito general en el que intentan impulsar un sindicato que sea independiente de la UTA.

Delegados de base dijeron que simpatizantes de la UTA bajaron de un subte y causaron destrozos en el lugar, pero aseguraron que continuarán con la votación.

"Vamos a seguir con esta semana de jornadas democráticas en las que el conjunto de los trabajadores resolverá si quiere o no un sindicato único", expresó Norberto Pianelli.

En declaraciones a la prensa, el representante gremial de la Línea D aseguró que no van a permitir que "una patota de gánsters" decida lo que tienen que hacer los empleados del subte "al mejor estilo de la dictadura militar".

Pianelli responsabilizó al Consejo Directivo de la UTA por lo ocurrido en Congreso de Tucumán y también por lo que le pueda suceder a los trabajadores y a sus familias en el marco de este "reclamo de justicia".

El plebiscito continuará hasta la próxima semana y los centros de votación estarán ubicados en distintas estaciones cabeceras. Mañana será el turno de Plaza de los Virreyes, de la Línea E, en el Bajo Flores.

De acuerdo con Fabián Basteiro, de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA), la votación que se realizaba desde las 5:00 de la mañana "en forma normal" se interrumpió "de forma sorpresiva y violenta cuando apareció una banda con armas, cuchillos y palos" en Congreso de Tucumán.

Después de los incidentes, tres personas fueron detenidas y al menos seis resultaron heridas, dijeron fuentes policiales.

En diciembre del año pasado la UTA organizó unas elecciones y logró nombrar nuevos delegados, lo que crispó aún más los ánimos de los trabajadores del subte, que cuestionan la transparencia de aquellos comicios, respaldan a sus representantes históricos y quieren independizarse de la central sindical.