Lenny Kravitz, espiritual y sexy conquistador de Bs As

Magistral show del multigenérico artista que desbordó talento y deslumbró al público. Relato de la noche donde demostró que sigue siempre en la ruta y unas 20.000 almas siguieron su camino. Galería de fotos exclusivas.

Por Canal26

Lunes 3 de Octubre de 2011 - 00:00

Lenny Kravitz prometía una gran apertura para el Personal Fest 2011 luego de las presentaciones de Deborah de Corral y el “Kravitz chileno”, Beto Cuevas. Vestido de negro con un saco con capucha y anteojos haciendo juego salió al escenario para presentarse en su querida Argentina después de seis años.

“Come on get it”, una de sus nuevas canciones, dio el puntapié inicial de la noche del domingo 2 de octubre en GEBA, donde una multitud esperaba su ansiado regreso después de aquellos shows en Boca en 2005 al que acudieron unas 80.000 almas. Después de hacer vibrar Rock in Rio en Brasil, Lenny llegaba para presentar "Black and White America"

Enseguida, llegaron dos de sus clásicos, porque en esta fría Buenos Aires, el moreno sexy prefirió regalar sus melodías más conocidas y sólo incluyó cuatro temas de su último disco. Sonaron “It ain´t over till it´s over” -el hit con el que comenzó su exitosa e imparable carrera- y “Mr. Cab driver”.

El público respondía con aplausos y ovaciones. Ellas, deliraron por sus palabras, sonrisas y gestos. Ellos, respondieron dando el OK ante semejantes músicos en escena que desplegaron soul, R&B, funky, rock... esas fusiones propias del estilo de Kravitz.

Un impactante y exquisito solo de flauta dio la apertura para “Black and white America”, “Fields of Joy” hasta uno de los más esperados: “American woman”. Cinturas hacia los costados para la pole dance de las damas. Las más cercanas al moreno buscaban robar su mirada, las otras seducían a sus parejas o a los mirones de figuras femeninas.

Como si más baile erótico faltara, otro de sus hits encendió la noche. Ese increíble acorde de “Always on the run” desató la furia y los saltos para evitar sentir el frío de la ciudad de la furia. Lo demás, fue un ir y venir entre clásicos y canciones nuevas. De “Believe” a “Stand” y de “Where Are We Running” a “Rock star city life”.

Simpático, con palabras justas y con la mente puesta solo en brindar su música, a pesar de los suspiros de las damas y los aplausos de los caballeros, Lenny vio pasar el tren que nunca falta en Geba y dijo “oh, ese es mi tren” para amagar con irse del escenario.

Había más: “Fly away” y “Are you gonna go my way” para ese desenfrenado e infaltable “oh oh oh, oh-oh-oh” al ritmo del estribillo de unas de las siempre esperadas canciones de su repertorio. Las luces se apagaron y saludó a Argentina, agradeciendo el calor de la gente.

Ante las ovaciones, volvió junto a sus músicos para un set acústico. Sentados en la orilla del escenario, interpretaron “I belong to you” y “Again”. Fue entonces cuando decidió meterse a cantar entre la gente, extender su mano para saludarlos y entregar su corazón y su ser. Como una verdadera estrella del rock, se perdió entre la multitud, secundado por guardaespaldas y con los flashes dando directamente sobre su rostro para retratar el momento con las digitales que nunca faltan en cada show.

Una más, y no pedimos más... llegó con “Let love rule”, la canción que suele elegir para cerrar sus conciertos y que hizo cantar al público durante varios minutos como una plegaria. El saludo, las ovaciones, el tradicional “Lenny, Lenny” y la ida del sensual y cautivante moreno que decidió cortarse las rastas después de perder a su madre y terminar su relación con Lisa Bonet, la actriz de The Cosby Show y madre de su hija Zoe. Se va caminando lento, luego de haber brindado una noche para el recuerdo y el deleite de los amantes de su espiritual música.

(Por Claudia Seta para 26Noticias, fotos exclusivas)