Coronavirus en Italia, el drama: suicidio de dos enfermeras, estrés por pandemia y médicos muertos

La cantidad de personal sanitario afectado llega a 5700 en toda Italia. Las comunidades religiosas, donde viven ancianos misioneros, también fueron alcanzados. “Rezan, enferman y mueren”. Drama en el país europeo.

Por Canal26

Miércoles 25 de Marzo de 2020 - 15:16

Coronavirus, Italia, hospital, enfermosCoronavirus en Italia.

El avance del Coronavirus en Italia, con cifras de muertos y contagiados alarmantes, que se incrementan a cada minuto, el drama excede a los afectados por la enfermedad. También tiene efectos devastadores en el personal de Salud del país, que se ve sobrepasado por las circunstancias.

 

El nombre de Daniela Trezzi de 34 años, enfermera en la terapia intensiva del hospital de Monza, el lugar donde impera el dolor y la angustia de los enfermos más graves por la infección del coronavirus, representa a los miles de trabajadores de la Unión Sindical de Base (USB) que se pusieron en huelga este miércoles para obligar a cerrar más fábricas cuyo funcionamiento hace peligrar la salud pública.

 

Ella no se enteró porque hace pocos días la encontraron ahorcada en el mismo hospital. No daba más, estaba desquiciada por el estrés.

 

Había quedado contagiada por el virus, temía haber contagiado a otros. Agotada por el trabajo, el espectáculo funesto de muerte y sufrimiento a su alrededor la llevaron al suicidio.

 

“Demasiado alto el precio que estamos pagando. Ya hubo otros suicidios”. Daniela vivía sola y queda una foto con la mascarilla, dos ojos bellos y vivaces. “No la olvidaremos nunca”, dicen sus compañeros.

 

Daniela, elevada a símbolo del sacrificio y la solidaridad porque vivía obsesivamente para salvar a los pacientes, eleva al martirio la muerte o el contagio de casi 5.700 médicos y personal sanitario en los hospitales donde se combate en primera línea el coronavirus.

 

Coronavirus, Italia, REUTERSHospitales no dan abasto. Reuters.

 

Son hasta este miércoles 29 los médicos que han perdido la vida. Los dos últimos son Rosario Lupo, de Bérgamo y Giuseppe Fasoli, médico jubilado que se había presentado voluntario en Brescia, donde la necesidad de profesionales es desesperante.

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