El hombre que mató a un rehén en la NASA había trabajado en la compañía

Se atrincheró en el edificio en la tarde del viernes con un arma y se suicidó después de matar a un hombre. Otra de las cautivas logró escapar. Las alarmas por amenazas en centros educativos aumentan la sensación de inseguridad de los ciudadanos. Vea el video con las imágenes de este nuevo hecho de violencia que conmociona a EE.UU.

Por Canal26

Sábado 21 de Abril de 2007 - 00:00

Un hombre entró en la tarde del viernes en el Centro Espacial Johnson en Houston (Texas) con un arma y se suicidó después de matar a un rehén varón, según confirmó la policía.

"Hay una víctima fatal y otro rehén, una mujer, ha logrado escapar", dijo el sargento Dwayne Ready de la policía de Houston en una breve conferencia de prensa.

Las dos muertes fueron el desenlace de un incidente que duró más de cuatro horas entre el agresor, agentes de la policía local, fuerzas especiales y efectivos federales.

El hombre, descrito como de unos 50 años, alto, rubio y vestido con pantalones vaqueros, se había atrincherado en el segundo piso del edificio 44 del complejo espacial tras lanzar amenazas, según la cadena de televisión CNN.

El hombre fue identificado como Bill Phillips, un ex empleado de la NASA que trabajó 12 años en el centro.

Philips trabajó como ingeniero espacial durante más de 10 años para la empresa espacial y, en la actualidad, era empleado de la empresa Jacobs Engineering, en California.

En el edificio, que alberga el centro de control de todas las emisiones de los transboradadores de la NASA, trabajan 44 personas, aunque en el complejo y en edificios cercanos trabajan más de 12.000 personas subcontratadas.

La Policía local se personó en el lugar de los hechos después de recibir una llamada de socorro a las 18.40 GMT y rodeó el edificio.

Miedo y alarma en EEUU

La matanza en la Universidad de Virginia ha desatado una psicosis en todo el país y se han disparado las alarmas por amenazas en campus universitarios y centros en Estados Unidos.

Los 17 colegios de la ciudad de Yuba, al norte de California, permanecieron cerrados el jueves después de que un individuo anunciase a su familia y a un sacerdote que iba a cometer un homicidio como el de Virginia Tech.

El viernes, cuando se cumplían ocho años de la matanza de Columbine, han aparecido pintadas amenazadoras en algunos institutos recordando ese día.