Crimen de Santiaguito: condenaron a perpetua a los cuatro acusados

Por Canal26

Martes 9 de Diciembre de 2008 - 00:00

Los cuatro acusados del crimen de Santiaguito Miralles, el niño de seis años secuestrado y asesinado en 2005, en Canning, fueron condenados a cadena perpetua por ser los "coautores del secuestro extorsivo seguido de muerte triplemente agravado" pese a haberse declarado inocente durante el juicio que se realizó en La Plata.


Se trata de Enrique Eloy Coito Piriz, su esposa Ana Isabel Machado Vargas, el hijo de éstos, Henry Alexander Coito Machado, y el padrino de éste, Abel Domínguez Farias.

Los jueces Carlos Rozanski, Norberto Lorenzo y Horacio Insaurralde los consideraron coautores de "secuestro extorsivo triplemente agravado por tratarse la víctima de un menor de 18 años, haber participado en el hecho tres o más personas y haberse ocasionado intencionalmente la muerte de la persona ofendida".

Durante el debate, del que participaron más de 110 testigos, se acreditó que "Santiaguito" fue visto por última vez a las 16 del miércoles 13 de julio del 2005, mientras jugaba en la vereda de su casa de la localidad de Canning, partido de Esteban Echeverría.

"Se hizo Justicia. Este es un mensaje para que la gente confíe en la Justicia. No cabía otra pena que esta, aunque es la máxima que establece el Código Penal a estos cuatro asesinos les queda chica", expresó Walter Miralles tras conocerse el fallo.

"Terminamos una etapa y ahora vamos a tratar de disfrutar más de la familia", dijo el hombre, quien agradeció a los investigadores. Junto Walter, estaba su esposa, Silvia, quien entre lágrimas alcanzó a decir: "Nos vamos más tranquilos aunque es muy difícil seguir. Hay que convivir con el dolor pero santiaguito nos da fuerzas".


Tras varias suspensiones, el debate empezó a principios de octubre último, en los tribunales federales de La Plata, ubicados en las calles 8 y 50, y durante las audiencias declararon unos 110 testigos.

En el juicio, los cuatro imputados se negaron a declarar, aunque Domínguez Farías acusó ante el Tribunal que "la causa está armada", en referencia a que no tuvo participación en el hecho.

"Santiaguito" (6) fue visto por última vez a las 16 del miércoles 13 de julio del 2005, mientras jugaba en la vereda de su casa de la localidad de Canning, partido de Esteban Echeverría.

De acuerdo a la investigación, casi 24 horas después sus familiares recibieron una llamada extorsiva en la que un hombre les exigió 20 mil pesos para liberarlo sano y salvo.

Los padres del nene desaparecido lograron juntar para el día siguiente unos 5.000 pesos, pero los delincuentes nunca más se comunicaron.

El cadáver del niño fue hallado tres días después de su desaparición en un pozo ciego ubicado en el predio de la quinta lindera a la casa de los Miralles.

La autopsia reveló que el niño murió como consecuencia de un traumatismo de cráneo y asfixia por inmersión, ya que recibió al menos dos golpes en la cabeza provocados por una maza u otro objeto similar.

Una vez inconciente pero aún con vida, lo introdujeron en la cámara séptica con un soga atada en la cintura a la que anudaron una caja con cerámicos.

Tras el hallazgo del cuerpo, los cuatro imputados, que trabajan de caseros en la casa quinta y hasta habían fingido ayudar a buscar al niño desaparecido, fueron detenidos como autores del secuestro y crimen.