"La ciudad está tomada por violentos", denunció la ministra tras la agresión

La titular de Desarrollo Social, Alicia Kirchner, llamó a los sectores en conflicto y a los "violentos" a "reflexionar". Se mostró sorprendida por lo ocurrido y dijo: "Nunca pensé que esto podía ocurrir en mi ciudad".

Por Canal26

Domingo 13 de Mayo de 2007 - 00:00

La ministra de Desarrollo Social, Alicia Kirchner, se mostró hoy sorprendida por las agresiones que sufrió en Río Gallegos y llamó a los sectores en conflicto y a los "violentos" a "reflexionar".

"Nunca pensé que esto podía ocurrir en mi ciudad", indicó la funcionaria -quien tenía un apósito adhesivo en su sien derecha que ocultaría un golpe- durante una conferencia de prensa ofrecida en el Salón Blanco de la Casa de Gobierno provincial junto al gobernador designado, Daniel Peralta.

Alicia Kirchner llamó "a los compañeros y a los vecinos a la reflexión", porque "Río Gallegos y Santa Cruz se lo merecen".

"Voy a seguir caminando por las calles de mi pueblo. Yo sé como están ustedes y por eso les pido prudencia. Les pido que entre todos busquemos la armonía social", señaló la funcionaria.

En tanto, reclamó "a los violentos que reflexionen", porque "puede haber diferencias, pero el diálogo puede contra eso".

"No creo que mi ciudad sea violenta, acá es como una ciudad tomada, quieren que no salgamos, que no caminemos", expresó la hermana del presidente.

Remarcó que "no es bueno que las comunidades se destruyan a si mismas" y admitió que habló con el presidente Nestor Kirchner:"estaba preocupado y lo tranquilicé".

Visiblemente afectada por los incidentes, relató el episodio y comentó: "hoy, como siempre, fui a comer al restaurante que voy cada vez que vengo. Como el día estaba tan lindo aproveché para ir caminando desde mi casa hasta la parrilla. En el camino me
encontré con los vecinos en un clima lindo, de reencuentro".

Estaba acompañada por sus hijas hijas, su yerno y por el padre Juan Carlos Molina, cuando en la parrilla se encontró "con un montón de familias de Gallegos".

"No pensé que iba a tener que dar cuenta de los actos habituales. Cuando empezamos a comer sorpresivamente un grupo de 10 o 20 y luego de 30 o 40 empezaron a molestar", remarcó Alicia Kirchner, durante la conferencia, fuertemente respaldada por militantes kirchneristas.

Luego, "se me acercó una docente, una chica muy jovencita, que me dijo que lo que necesitábamos era encontrar una solución. Le dije que siempre buscamos el diálogo y que no había drama en dialogar", sostuvo la titular de Desarrollo Social.

"Les dije que eligieran a cinco personas para decirle al gobernador y juntarnos. Me contestaron que sí y le tomé el teléfono. Al salir me ofrecieron hacerlo por la puerta del fondo, pero les dije que nunca salí por la puerta de atrás, ni del costado, porque siempre he dado la cara en todos los actos de mi vida", señaló.

Entonces, "me golpearon, patadas, me tiraron el pelo, pero esa me la aguanto", afirmó la funcionaria, aunque aclaró que "el dolor" se lo provocó el hecho de que los docentes hayan sido los generadores de la "violencia".

Por su parte, el flamante gobernador señaló que desde la Asociación Docentes de Santa Cruz (Adosac) se comunicaron con él para expresar que ese gremio no había impulsado la agresión.

Peralta señaló que continuará "apostando al diálogo", pero advirtió que si continúan los episodios de violencia "será difícil, sino imposible, llegar a un acuerdo".

Contó que cuando se enteraron de que "la agresión se estaba por producir" ofreció a la ministra custodia policial, aunque ésta
la rechazó inmediatamente.

“Ayer trasmití un mensaje diciendo que apostábamos a la paz, al diálogo y a la convivencia. Hoy se me responde de esta manera, en la figura de nuestra compañera", expresó el gobernador designado, al tiempo que calificó la agresión como "cobarde".

A su vez, llamó a la "reflexión a los sectores que están en el conflicto" y pidió que se dejen "de lado la agresión y mucho más contra mujeres", ya que de esa forma "se vuelven inviables las
negociaciones y se vuelve a la agresión un arma peligosa para todos".

"Este no es un Gobierno débil, no es un Gobierno condicionado y no va a permitir que esta metodología se implemente en Santa Cruz", subrayó el flamante mandatario provincial y destacó que este conflicto "ya no es una cuestión salarial".

Durante la conferencia, la ministra se vio pálida, con cara de preocupación y en distintos pasajes de su encuentro con la prensa se le quebró la voz.