Un enfermero asesinaba a sus pacientes con inyecciones para estar "más tranquilo con su celular"

Dos personas fallecieron a causa de los sedantes. Foto: Unsplash.

Un enfermero de 27 años fue condenado a cadena perpetua en la ciudad alemana de Múnich por el asesinato de dos pacientes e por intentar hacer lo mismo con otros seis, en 2020. Entre las víctimas se encontraba el reconocido escritor Hans Magnus Enzensberger, quien logró sobrevivir después de haber sido trasladado a cuidados intensivos.

El hombre trabajaba principalmente en salas de guardia de un hospital de la capital alemana a donde los enfermos eran trasladados tras una operación. Durante el juicio, reconoció que le inyectaba sedantes a sus pacientes para "tener mayor tranquilidad en sus turnos" y "poder estar con su celular".

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¿Cómo fue descubierto?

Tras el caso de Enzensberger, que inicialmente parecía no tener explicación, un médico buscó otros casos similares para poder comparar y conocer más. Así comprobó que en cada oportunidad, el hombre señalado había sido el enfermero de guardia. Se les realizó a los pacientes análisis de sangre que revelaron una sobredosis de medicamentos no recetados y se dio aviso a la fiscalía.

En la investigación se descubrió que el hombre actuaba de esta manera para poder estar tranquilo y usar su celular mientras trabajaba bajo los efectos del alcohol. El enfermero fue declarado culpable de inyectar cócteles de medicamentos sin receta a varios pacientes, dos de los cuales murieron tras estar en coma. Además, fue condenado por seis intentos de homicidio.

El enfermero confesó que quería "mayor tranquilidad en sus turnos". Foto: Unsplash.

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¿Quién era Hans Magnus Enzensberger?

Enzensberger fue un poeta y ensayista, considerado uno de los intelectuales más importantes de Alemania y uno de los representantes del pensamiento de la posguerra. El escritor alternaba su trabajo como profesor con la vida literaria, el periodismo y la traducción.

Vivió en Cuba, Noruega, Italia y Estados Unidos y México. En 1979 se instaló finalmente en Munich.

El autor de libros como “El corto verano de la anarquía” y “Poesías para los que no leen poesías”, falleció de causas naturales el 24 de noviembre de 2022 a los 93 años en Alemania, en la ciudad de Múnich.