Fiscal pidió sobreseer al tirador serial de Belgrano

Por Canal26

Lunes 29 de Diciembre de 2008 - 00:00

Los fiscales que investigan el crimen de Alfredo Marcenac, cometido en julio del 2006, solicitaron el sobreseimiento del presunto tirador serial de Belgrano, Martín Ríos, al considerar que es un enfermo mental y es inimputable, informaron fuentes judiciales.

Los fiscales porteños Mariano Solessio y Fernando Fiszer consideraron, tras haber analizado los resultados de los peritajes psicológicos y psiquiátricos realizados al imputado, que Ríos "padece de una enfermedad mental que lo privó del ámbito de libertad y autodeterminación imprescindibles para responsabilizarlo penalmente".

Adrián Marcenac, padre de Alfredo, dijo esta tarde a la prensa, al conocerse este giro en la causa, que se siente "totalmente decepcionado" con el pedido de los fiscales.

"Parece que estos dos fiscales se olvidaron de su función, que es acusar. Se basaron exclusivamente en el informe del psiquiatra cuando en toda la historia clínica nunca se habló de esquizofrenia y siempre de problemas de personalidad y de que este individuo simulaba", explicó el hombre.

"Ante la duda, tendría que haber elevado la causa a juicio y, en esa instancia, cada una de las partes iba a poder debatir la cuestión en forma pública", indicó Marcenac, quien dijo que "lo único" que le queda a él y a su familia es "esperar" que la jueza María Fontbona de Pombo no haga lugar al pedido de los fiscales.

En tanto, los fiscales, además de pedir el sobreseimiento, piden a la jueza Fontbona de Pombo que se implemente "una medida de seguridad suficiente y adecuada" para el tratamiento de Ríos "en atención a la seria peligrosidad para terceras personas evidenciadas en su conducta y médicamente corroborada en los peritajes ya evocados".

En caso de que la jueza no haga lugar la pedido, los fiscales ya adelantaron que recurrirán a la Cámara de Apelaciones en lo Criminal y Correccional para resolver el conflicto.

A principios de este mes, las psicólogas María Elena Chicatto y Mónica Herrán, del Cuerpo Médico Forense, concluyeron en su informe a los fiscales que, si bien no podían responder a dos años de los hechos, Ríos tiene claros signos de no poder comprender la criminalidad de sus actos.

Respecto al punto de la dirección de la conducta, las profesionales respondieron que ellas, como psicólogas, no pueden determinarlo porque "la opinión necesariamente debe ser desde la óptica médica", señaló el informe.

Esta fue la quinta pericia que se vuelca favorable a la postura de que Ríos es inimputable, ya que hubo dos en Capital Federal -de la causa Marcenac-, y otras dos en provincia de Buenos Aires -por tenencia ilegal de arma-, que lo definieron como un esquizofrénico que no comprende la criminalidad de sus actos, ni dirige sus acciones.

De hecho, el 25 de julio pasado, Ríos fue sobreseído y declarado inimputable por el Tribunal Oral en lo Criminal 7 de San Isidro que debía juzgarlo en la causa por portación ilegal de arma que se le abrió cuando fue detenido con la pistola calibre 380 con la que se cometieron los ataques en Belgrano.

Ríos se encuentra actualmente internado en la Unidad Penitenciaria del Hospital Psiquiátrico Borda, procesado por el homicidio agravado por placer de Marcenac, cometido el 6 de julio de 2006 en el cruce de la avenida Cabildo y José Hernández, en pleno centro comercial de Belgrano.

Ese día, según la investigación, Ríos descargó 13 tiros contra personas que caminaban por la avenida Cabildo durante el horario pico de la tarde.

Los investigadores determinaron que el agresor disparó a matar contra Marcenac y sus dos amigos que lo acompañaban, quienes resultaron heridos al igual que otras cuatro personas.

A pesar de que fue intensamente buscado por la Policía Federal, Ríos fue detenido por la policía bonaerense, de casualidad, ocho días después del hecho, cuando cuidaba el auto de su madre en la localidad de Munro, que había olvidado las llaves adentro.

También se lo acusa de haber cometido otros tres ataques a balazos previos en el mismo barrio contra una confitería, un tren y un colectivo de la línea 67, hechos en los que hubo heridos.