Murió Brian, el nene de 14 años baleado por motochorros en Flores

Inmenso dolor para la familia. Falleció en el Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez. Este mediodía se decidió desconectar al menor del respirador artificial ya que médicamente no había nada más que hacer por su vida.

Por Canal26

Lunes 26 de Diciembre de 2016 - 03:53

Brian Aguinaco y su padre - Chico baleado en Flores

El chico de 14 años baleado el sábado por "motochorros" en el barrio porteño de Flores murió este lunes en el Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez, donde se encontraba internado con muerte cerebral.

 

El menor había sido internado en primer término en el hospital Piñeiro, donde fue operado a raíz de las gravísimas heridas por un balazo, y luego fue derivado al Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez, donde permanecía en gravísimo estado.

 

Este mediodía se decidió desconectar al menor del respirador artificial ya que médicamente no había nada más que hacer por su vida.

 

El hecho ocurrió este sábado por la tarde cuando dos motochorros le robaron la mochila a una mujer que estaba en la vereda, en el cruce de las calles Asamblea y Robertson.

 

En ese momento pasaron en auto un abuelo con su nieto, quienes iban a cortarse el pelo antes de la Navidad, pero los ladrones pensaron que los estaban persiguiendo y les dispararon.

 

Las versiones sobre el contexto de los disparos no son coincidentes, porque algunas señalan que el sexagenario intentó detener a los motochorros y encerrarlos con su auto.

 

Una de las balas impactó en la cabeza del chico de 14 años, quien iba en el asiento del acompañante en el Renault 19 de su abuelo Enrique, de 69.

 

Este domingo, un grupo de vecinos se concentró por la noche en las puertas de la Comisaría 38 del barrio de Flores para reclamar más seguridad, y se vivieron momentos de tensión cuando varios de ellos ingresaron a la sede policial para pedir ser recibidos por el comisario y, al no lograr una respuesta, rompieron vidrios dentro del lugar.

 

Luego los ánimos se calmaron y los manifestantes se retiraron del interior de la Comisaría, aunque continuaron apostados en la vereda a la espera de ser recibidos por el comisario.

 

En declaraciones a los periodistas, los vecinos denunciaron que existen en ese barrio constantes casos de robos en la zona y reclamaron más seguridad y justicia por el chico baleado.

 

Una marcha similar en reclamo de mayor seguridad fue convocada ni bien trascendió por los medios la muerte del menor.