La defensa de Bolsonaro reiteró que el expresidente "jamás" participó en el intento de golpe de Estado

La defensa de Jair Bolsonaro niega cualquier intento de golpe de Estado. Foto: Reuters.

La defensa de Jair Bolsonaro reiteró este viernes que el expresidente brasileño "jamás" participó en intentos de golpe de Estado, pero las sospechas continúan creciendo con unos comprometedores documentos revelados por la Corte Suprema.

La situación del líder de la ultraderecha pareció complicarse cuando la revista 'Veja' reveló algunos mensajes hallados por la Policía en el teléfono del teniente coronel Mauro Cid, antiguo ayudante oficial de Bolsonaro, detenido por presuntos fraudes con vacunas anticovid.

El contenido de los mensajes, con tintes golpistas, fue confirmado este mismo viernes por la Corte Suprema, que levantó el secreto de Justicia que pesaba sobre dichos contenidos.

Jair Bolsonaro, expresidente de Brasil. Foto: Reuters.

En algunos, anteriores a las elecciones de octubre pasado, en las que Bolsonaro fue derrotado por Luiz Inácio Lula da Silva, se habla de "un orden constitucional desvirtuado por tribunales superiores" que podría justificar la declaración de un estado de sitio.

Sin embargo, uno de los mensajes va más allá y parece una especie de borrador de un decreto que invocaría una intervención militar. "Para asegurar la necesaria restauración del Estado Democrático de Derecho" y "con base en disposiciones expresas de la Constitución, se declara el estado de sitio", reza el texto hallado.

Asimismo, un documento del mismo tenor había sido encontrado en la casa del exministro de Justicia Anderson Torres, del entorno íntimo de Bolsonaro y quien está en prisión domiciliaria por su presunta participación en la trama que condujo a los sucesos del pasado 8 de enero.

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Según los abogados, esos mensajes "comprueban, una vez más", que Bolsonaro "jamás participó en ninguna conversación sobre un golpe de Estado".

La invasión al Palacio de Planalto, Brasil. Foto: Reuters.

Entre sus argumentos sostienen que Mauro Cid "por la función ejercida, recibía todas las demandas" que "deberían llegar al presidente de la República" y que su teléfono era como "una simple caja de correspondencia que registraba las más diversas lamentaciones".

Sin embargo, el magistrado Alexandre de Moraes, responsable en el Supremo de una investigación sobre la asonada de enero, autorizó este viernes a la Policía tomar otra declaración a Bolsonaro.

Las nuevas sospechas surgen en momentos en que la Justicia electoral se apresta a juzgar a Bolsonaro por supuestos abusos de poder político y económico durante la campaña electoral. El juicio está previsto para el próximo jueves y, si son comprobados esos abusos, el líder de la ultraderecha puede perder todos sus derechos políticos por un plazo de ocho años.