Un tiburón atacó a una influencer mientras buceaba: reveló que logró arrancarle los ojos para que la suelte

Addison Bethea junto a su hermano, quien le salvó la vida. Foto: Facebook/FightLikeAddison

Addison Bethea, de 17 años, estaba buceando con su hermano Rhett Willingham y sus amigos en Florida cuando fue atacada por un tiburón. La adolescente explicó que solo había estado un rato en el agua cuando sintió que algo agarró salvajemente su pierna.

Después de un año del ataque, la influencer reveló que primero pensó que era una broma, pero después se dio cuenta que era algo más grave: un tiburón toro, que tiene casi 2 metros de largo. El animal le mordió el muslo derecho y la arrastró hacia el fondo del agua.

Según las declaraciones de Addison a "The Guardian", el animal salió "de la nada" y la atacó sobre sus piernas. En ese momento, su hermano escuchó los gritos y logró ayudarla antes de que se la lleve.

Addison Bethea lleva una vida normal. Foto: Instagram/Addison_Bethea

“Luego volví a subir y fue entonces cuando vi que todo sucedía al mismo tiempo: la cola del tiburón agitándose, la sangre. Fue mucha”, contó Bethea. Además, contó que si bien la mordida fue tremenda, no sintió dolor en ese momento.

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Addison le arrancó los ojos al tiburón

En ese contexto, la joven explicó que a pesar de la terrible situación, supo como defenderse: "Recuerdo haber sentido todo. Es como un papel de lija", dijo sobre la piel del tiburón. “Fue entonces cuando empecé a golpear al tiburón”, explicó. Y luego dijo que llegó a arrancarle los ojos para que la suelte, y los describió como del "tamaño de una pelota de béisbol".

Por su parte, su hermano Rhett, bombero y paramédico, pudo rescatarla y subirla a un barco de rescatistas que escucharon todo y se acercaron a ayudar. En ese momento le hicieron un torniquete para detener la sangre.

Addison en plena recuperación. Video: Twitter/CarianneLindsey.

Addison lo último que recuerda de ese momento es que "todo su muslo había desaparecido" y se desmayó. Rápidamente, fue trasladada a un hospital cercano donde lograron salvarle la vida con una serie de operaciones: le amputaron la pierna derecha por arriba de la rodilla.

Luego de días de recuperación, pudo dar sus primeros pasos con ayuda de un andador. “Realmente no entiendo cómo lo hice”, expresó Addison que, luego de un año, lleva una vida normal con una prótesis en la pierna.

“Una vez que pasaste por algo así, no das nada por sentado. Lo que tenés que saber es que una vez que entras al océano, ese no es tu territorio. El tiburón estaba siguiendo sus instintos. Sí, es un bajón que me haya elegido para morderme, pero puede suceder”, finalizó.