El Papa Francisco fue dado de alta tras estar internado por bronquitis: "Todavía estoy vivo"

El Sumo Pontífice dejó el hospital Gemelli de Roma y bromeó ante fieles y periodistas que lo esperaban. "Solo sentí malestar y no tuve miedo", afirmó.

Por Canal26

Sábado 1 de Abril de 2023 - 07:07

Papa Francisco abandonó el hospital de Roma tras su internación. Foto: REUTERS.Papa Francisco abandonó el hospital de Roma tras su internación. Foto: REUTERS.

El papa Francisco recibió el alta después de tres días ingresado por una bronquitis y a su salida del hospital Gemelli de Roma quiso demostrar su buen estado bajándose del coche ayudado de un bastón y lanzó un mensaje: "Todavía estoy vivo".

El pontífice, que fue hospitalizado el miércoles a causa de una bronquitis, salió del Policlínico sentado en el asiento del copiloto de un pequeño coche, escoltado por la policía y agentes de su seguridad.

Pero, al abandonar la clínica, se detuvo frente a un grupo de fieles, curiosos y periodistas que lo saludaban y ante quienes confesó cómo ha vivido estos días en los que el mundo siguió de cerca su recuperación.

"Solo sentí malestar y no tuve miedo, estoy todavía vivo", insistió Francisco a los periodistas que le preguntaban de forma insistente, ayudado con un bastón y siempre con una sonrisa en el rostro.



El pontífice tuvo palabras de agradecimiento para los médicos y enfermeros que lo trataron en el Gemelli y también alabó la labor de los periodistas que han seguido su estado de salud.

Antes de volver al vehículo, el papa abrazó a una pareja que perdió a su hija y juntos rezaron en estos momentos de dolor. 

Papa Francisco, Vaticano. Foto: Reuters.

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Sus días durante la internación

En estos días internado, en un apartamento de uso exclusivo de los pontífices desde tiempos de Juan Pablo II, Francisco leyó diarios, rezó en la capilla y hasta cenó pizza con los sanitarios y sus colaboradores.

Además, visitó a los niños de la unidad de neurocirugía y oncología, llevándoles huevos de pascua y otros detalles, y llegó incluso a bautizar a uno de ellos, el pequeño Miguel Ángel, un momento grabado por las cámaras vaticanas y que demostró que el papa caminaba y gozaba de un aparente buen estado.

"La cosa más hermosa de estos días ha sido la visita a los niños", reconoció el pontífice a su salida. CON INFORMACIÓN DE EFE

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