AES: la nueva alianza africana que busca dejar atrás el dominio francés

Firma de la Carta Liptako-Gourma por la que se crea la Alianza de los Estados del Sahel (AES). Foto: Twitter/ @GoitaAssimi

Mali, Burkina Faso y Níger oficializaron días atrás una alianza (Alianza de Estados del Sahel) en términos políticos y militares. El anuncio, confirmado en una conferencia de prensa entre representantes de los tres países, abrió las puertas a una colaboración mucho más estrecha entre esas naciones que tienen problemáticas y enemigos en común.

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Dar vuelta de página a la influencia francesa

Los tres países firmantes del acuerdo bajo el nombre de “Carta de Liptako Gourma” – por una subregión geográfica que comparten –, mostraron imágenes de sus respectivos gobiernos en el día del documento final. Los presidentes Assimi Goita de Mali, Ibrahim Traore de Burkina Faso y Abdourahmane Tchiani de Níger, dieron así un histórico paso.

Juntas militares de Níger, Mali y Burkina Faso. Foto: Reuters. 

Lo “histórico” radica en que es el primer acuerdo de este tipo, sin influencia directa de Francia. Los tres países, que experimentaron golpes de Estado entre 2020 y 2023, han tenido gobiernos con tintes anti franceses que buscan articular la región bajo una nueva cooperación más “panafricanista”. De hecho, los firmantes no ocultan su intención de conformar, en algún momento, una posible “Federación” sobre el Sahel, que articule sus economías y su política interior y exterior.La Junta Militar de Níger anuncia que juzgará al presidente Mohamed Bazoum por “alta traición”.

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Vientos de cambio

La nueva alianza del AES, viene a sustituir una alianza creada en 2014, con auspicio francés, llamada “G5” y que agrupaba a los tres firmantes actuales, junto a Chad y Mauritania. En pocas palabras, el “G5” francés para el Sahel ha quedado definitivamente desarticulado con la creación de esta nueva alianza con una agenda propia, lejos de Francia.

Malí, Níger y Burkina Faso firman el pacto de seguridad del Sahel. Reuters.

También, resulta indudable que la creciente influencia rusa en la región del Sahel marca el ritmo de estas nuevas agendas. De hecho, solo un día antes de la firma de estos acuerdos, el viceministro de defensa ruso, Yunus-bek Yevkurov, estuvo reunido con el presidente de Mali, en lo que parece ser parte de un acercamiento estratégico de Moscú hacia estos gobiernos africanos, y persuasivo también, pero para marcarle el terreno a Francia de que su “hegemonía” en África está terminando.

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Principales puntos de la alianza

La AES fue presentada con un documento que consta de 17 artículos. Los principales apartados estuvieron enfocados en la cooperación política y militar.

En su artículo 2, se estableció una arquitectura de defensa colectiva y de asistencia mutua. En el artículo 4, se habla de una coordinación estrecha para combatir decididamente a grupos terroristas que operan en la triple frontera de los países firmantes. En el artículo 5 se estableció otro acuerdo para enfrentar “rebeliones armadas” que afecten la integridad territorial de los países firmantes.

Coronel Assimi Goita. Foto: Twitter/ @GoitaAssimi.

Pero uno de los apartados más categóricos fue el del artículo 6, donde se estableció que cualquier ataque a la soberanía o integridad territorial de alguno de los miembros, sería considerado como una agresión a las otras partes, incluyendo el uso de la fuerza militar como respuesta. Este punto se vuelve relevante para la Junta de Níger que fue amenazada en reiteradas oportunidades por la ECOWAS y Francia, de que sería derrocada mediante el uso de una fuerza militar extranjera. Siguiendo estos lineamientos, de haber un ataque extranjero contra Níger, la AES se activaría.

En última instancia, la alianza mostró puntos interesantes de cooperación en materia económica y también política, aunque lo más relevante es que la alianza se muestra abierta a sumar nuevos miembros africanos que “compartan” su visión geopolítica sobre dar vuelta de página a la influencia francesa. Esto parece ser un guiño a países como Guinea que también tuvo un golpe de Estado anti francés en 2021, pero aún no se acercó del todo a la nueva AES.

Como fuera, la nueva alianza del AES, es una puntada más para el dominio histórico que Francia ostentó en el Sahel durante décadas, y abre las puertas a una nueva página de la geopolítica africana.