Experimentos con "energía verde": España trazó un plan para combatir la crisis eléctrica

España avanza con la experimentación a través de su división Enel Green Power. Foto: Télam.

Europa continúa con su camino por la adopción masiva de energías verdes y avanzando por un plan para eliminar la necesidad de los combustibles fósiles. Además de contrarrestar la crisis provocada por la guerra entre Ucrania y Rusia, los nuevos métodos serían una gran contribución para combatir el cambio climático.

Una de las empresas que ha tomado la iniciativa para ello es Endesa, la empresa multinacional eléctrica española, que está intentando promover distintas iniciativas ecológicas a través de su división Enel Green Power España. Sus primeras pruebas serán en Adorra, donde se pondrá en funcionamiento catorce plantas de energías renovables, con una inversión de 1500 millones de euros.

Según Rafael González, director general de Generación de Endesa, el proyecto prevé la construcción de siete grandes instalaciones eólicas y fotovoltaicas. Todas las fuentes serán híbridas, lo que quiere decir que se contará con dos centros de almacenamiento de baterías, un electrolizador para la producción de hidrógeno verde y un compensador síncrono para garantizar la estabilidad de la red.

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Estos 14 proyectos renovables con siete hibridaciones permiten generar electricidad a partir de dos o más fuentes, en este caso de origen renovable. Esto significa que puede servirse de la energía fotovoltaica cuando brilla el sol y de otra fuente (eólica) cuando el tiempo no acompaña, lo que garantiza un suministro más estable, eficiente y con una producción mayor.

Las nuevas plantas renovables se ubicarán en Albalate del Arzobispo, Híjar, Samper de Calanda, Castelnou, Andorra, Calanda, Alcañiz, La Puebla de Híjar, Jatiel y Alcorisa.

Junto al proyecto de hibridación, se incluye el desarrollo de dos plantas de almacenamiento de baterías que aprovechan la producción renovable, reduciendo la pérdida energética y optimizando su uso.

También se instalará un electrolizador que gestionará los excedentes de energía renovable para la producción de hidrógeno verde y un compensador síncrono que permitirá verter esa energía renovable con mayor calidad y estabilidad, favoreciendo el buen funcionamiento de la red de transporte eléctrico.