El Supremo de Pakistán concedió la libertad bajo fianza a Imran Khan pero seguirá en prisión

Imran Khan, ex primer ministro de Pakistán. Foto: REUTERS.

El Tribunal Supremo de Pakistán concedió la libertad bajo fianza al ex primer ministro, Imran Khan, y a un colaborador cercano, Mahmood Qureshi, acusados de filtrar documentos confidenciales, aunque ambos políticos no saldrán por el momento de prisión al tener otros casos pendientes.

"Tanto Khan como Qureshi han obtenido la libertad bajo fianza por el Tribunal Supremo en el caso (...) pero seguirán en la cárcel porque se encuentran detenidos bajo otros dos casos", dijo Ahmed Janjua, un portavoz del partido del ex mandatario, Pakistan Tehreek-e-Insaf.

El partido de Khan, tras darse a conocer la decisión judicial, calificó el caso de ridículo.

"¿Qué puede haber más ridículo que el hecho de que Pakistán haya enviado a la cárcel a su primer ministro y ministro de Exteriores por exponer una conspiración extranjera?", se preguntó la formación opositora.

Imran Khan, ex primer ministro de Pakistán. Foto: India Today.

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El juicio en su contra y la situación política del país

Un tribunal especial comenzó el 2 de diciembre el juicio en prisión y abierto al público contra ambos políticos opositores, acusados de haber difundido correspondencia entre la embajada de Pakistán en EE.UU. y las autoridades de Washington.

Khan afirmó que el cable diplomático probaría la supuesta conspiración para derrocarlo del poder, al reivindicar una postura neutral en la guerra de Ucrania. La antigua estrella del críquet fue derrotada por una moción de censura en abril de 2022 y tuvo que abandonar el Gobierno.

El ex primer ministro se encuentra actualmente detenido en al menos dos casos, aunque cuenta con más de un centenar pendientes en diferentes cortes del país y ha negado repetidamente las acusaciones.

Ex primer ministro de Pakistán, Khan_Reuters

Pakistán tiene previsto celebrar elecciones generales el próximo 8 de febrero y la participación de Khan es una incógnita por el momento, ya que fue condenado a tres años de prisión por corrupción al no declarar la cantidad de dinero que ganó vendiendo los obsequios recibidos durante su mandato como primer ministro de 2018 a 2022.

Esta sentencia fue suspendida el pasado agosto por un tribunal paquistaní, aunque el exmandatario fue inhabilitado para ejercer cargos públicos por la Comisión Electoral de Pakistán y esta decisión debe ser recurrida ante la justicia.

El ex primer ministro ha denunciado que las autoridades paquistaníes tienen como objetivo mantenerlo fuera de la carrera electoral.